domingo, 20 de octubre de 2013

¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?






Muy buenas a todos. Y os preguntaréis el "¿por qué?" de tantos porqués. Bien. A caso no existen cientos de preguntas sin respuesta, o por lo menos que no sepamos? Preguntas que parecen no tener sentido, pero ahí están, haciéndonos pensar.
Aquí os dejo unas cuántas de esas muchas preguntas:

- ¿Por qué en las pelis de misiones secretas, robos y demás, siempre, encima del diamante, hay un conducto de ventilación?

- ¿Por qué los profes, cuando haces caso a alguien porque te vas a beneficiar de ello, siempre te hacen la pregunta tonta de ... ¿y si te dice que te tires por una ventana, lo harás? Pues noooo.... Ains....

- ¿Por qué cuando nos enfadamos cruzamos los brazos?

- ¿Por qué cuando cogemos una caja de medicamentos, por muchas vueltas que le demos, siempre la abrimos por el lado que no es y aparece el prospecto, ahí, doblado?

- ¿Por qué cuando te duele una herida, siempre llega alguien que te pregunta: ‘¿te duele? eso es que se está curando…’

- ¿Por qué cuando nos sonamos los mocos abrimos el pañuelo y miramos lo que hemos echado? ¿Qué esperamos encontrar? ¿Berberechos?

- ¿Por qué las monedas de 50 céntimos son más grandes que las de 1€ si valen menos?

- ¿Por qué cuando nos enteramos que alguien que conocíamos ha fallecido decimos "no somos nadie..."?

- ¿Por qué "separado" se escribe todo junto y "todo junto" se escribe separado?

- ¿Por qué cuando llegamos a lo alto de una montaña nos ponemos las manos en las caderas?
Saludos!!

jueves, 6 de octubre de 2011

EL PRECIO DE LA FELICIDAD


Me siento en la mesa, y empiezo a escribir. Miro arriba, tengo un techo. Miro abajo, tengo un suelo. Y todo mi alrededor está repleto de cosas materiales e innecesarias. ¿Y somos felices? Deberíamos...
Nuestras necesidades básicas están cubiertas. Nos volvemos indiferentes, insensibles. Tenemos comida, un hogar, nuestra televisión, nuestro teléfono movil, nuestro ordenador, agua, luz, nuestros caprichos...Y reitero ¿somos felices? No. Deseamos tener más. Simplemente dejamos de valorar todas esas cosas porque siempre han estado ahí.

Hay gente en este mundo tan pobre que jamás rozará tan siquiera nuestra situación. Ni la olerá... Hay niños que jamás podrán disfrutar de su infancia jugando, o del confort de un baño caliente. Gente que jamás podrá abrir los ojos acostado en la cama y sentirse feliz por tener tranquilidad y un hogar. Personas pobres de verdad. Y se entiende por pobreza, la falta de lo necesario para vivir, o sencillamente, para sobrevivir.
Siento una mezcla de impoténcia, rabia, lástima... Por saber que aunque es triste, esta es la realidad. Si. Personas que tienen tanto y aspiran a mucho más. Y otras que no tienen nada, ni tan siquiera sueños posibles de alcanzar. Solo vivir una rutina, dónde lo único que importa es sobrevivir.

Y nos planteamos que significa la felicidad. Y porsupuesto es algo relativo. Para esos seres humanos la felicidad consiste en encontrar algo de comida para poder subsistir el día a día, o poder llegar sanos a esa fuente que esta a kilometros, descalzos, sólo para poder beber un poco de agua. Y para nosotros, que significa esa sensación? Todavía nos siguen preguntando si somos felices, y en muchas ocasiones contestamos que no.
La felicidad no siempre depende de lo que pasa a nuestro alrededor, sino de lo que pasa dentro de nosotros. Sino quién entiende, que haya fotos, vídeos, documentales.. en los que salen niños extremadamente pobres, adolescentes trabajando, niños con armas, hombres y mujeres adultos intentando mantener viva a su família envueltos en la miseria, a veces enfermos, con partes de su cuerpo amputadas... Y aún así no pierden su sonrisa, y esa luz en los ojos. Cómo si nada de ese horror les hiciera sentir menos felices... Es desesperante.

Existe esta breve pero interesante historia sobre la felicidad... Yo hace unos años tuve oportunidad de leerla, y ahora quiero compartirla...

"En cierta ocasión se reunieron todos los dioses y decidieron crear al hombre y la mujer. Planearon hacerlo a su imagen y semejanza. Entonces uno de ellos dijo:
- Si los vamos a hacer a nuestra imagen y semejanza van a tener un cuerpo igual al nuestro, fuerza e inteligencia igual a la nuestra. Debemos pensar en algo que los diferencie de nosotros, sino estaríamos creando nuevos dioses.
- Debemos quitarles algo, pero... ¿qué les quitamos?
Después de mucho pensar uno de ellos dijo:
- Ya sé... vamos a quitarles la felicidad, pero el problema va a ser donde esconderla para que no la encuentren jamás.

Propuso el primero:
- Vamos a esconderla en la cima del monte más alto del mundo; a lo que inmediatamente repuso otro:
- No, recuerda que les dimos fuerza, algún día alguien subirá y la encontrará, y si la encuentra uno, ya todos sabrán donde está.
Luego propuso otro:
- Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar, y otro contestó:
- No, recuerda que les dimos inteligencia, alguna vez alguien construirá una esquina por la que pueda entrar y bajar, y entonces la encontrará.
Uno más dijo:
- La esconderemos en un planeta lejano a la tierra.
Y le dijeron:
- No, recuerda que les dimos inteligencia, y un día alguien construirá una nave en la que pueda viajar a otros planetas y la descubrirá, y entonces todos tendrán felicidad y serán iguales a nosotros.


El último de ellos, era un dios que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas de los demás dioses, analizando en silencio cada una de ellas y entonces rompió el silencio y dijo:
- Creo saber donde ponerla para que realmente nunca la encuentren, todos voltearon asombrados y preguntaron al unísono:
- ¿En donde?
- La esconderemos dentro de ellos mismos. Estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán.
Todos estuvieron de acuerdo, y desde entonces ha sido así, el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la trae consigo..."


Lo dicho, la felicidad no tiene un precio que se pueda pagar. El único "precio" que tiene la felicidad consiste en saber buscarla dentro de uno mismo.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

VERGÜENZA






Vergüenza. Eso es lo que siento cuando veo cosas como esta http://amigasanaymia.blogspot.com/

Para la gente que no lo sepa, las siglas ANA hacen referencia a la anorexia y las de MIA a la bulimia.
Este es solo uno de los muchos blogs que circulan por la red apoyando a la anorexia y bulimia, o simplemente dando "consejos" para seguir enferma toda la vida.

Éstas chicas que se dedican a hablar de cosas tan serias, a escribir artículos de que hacer o que dejar de hacer para perder peso, de como ayunar, como vencer la tentación de comer... Sólo ayudáis a que chicas con estos problemas elijan querer seguir enfermas en vez de curarse.

Que mejor ejemplo que el que os dejo aquí arriba. Si le dais al link veréis como la creadora de ese blog empieza diciendo... "que no se hace responsable de los comentarios emitidos". Que de responsable no tiene ni una gota es algo que salta a la vista. Luego sigue diciendo... "si te sientes ofendida abandona la pagina..." Ofendida? Avergonzada mejor dicho. Y para rematar, dice:  "menor de 15 años? mejor aléjate...." Se ve que si tienes 16 años según su retorcida forma de pensar, ya no puede condicionarte nada de lo que escribe. ¿A caso una niña a los 16 años deja de ser vulnerable e insegura? Teniendo en cuenta que su salud mental no es la adecuada. Supongo que lo pone para tener su conciencia un poco más tranquila.

Yo caí en las redes de la anorexia con 17 años. La anorexia y bulimia no tienen un límite ni un tope de edad. Ni un sexo, hay chicas y también chicos.
Cada uno es muy libre de hacer lo que quiera, pero siempre marcando unos limites. Veo totalmente ilícito e incomprensible, que alguien apoye algo tan serio como son estas dos enfermedades, de las que cuesta tanto salir. Enfermedades que te roban años de tu vida que jamás recuperas, y sólo te hacen querer aspirar a una sola cosa: estar más y más delgada. Vergonzoso la facilidad con la que ésta clase de gente fomentan y frivolizan sobre un tema tan serio.
Desde luego son mentes enfermas que no han rozado tan siquiera un poco la recuperación o el progreso en la anorexia.

lunes, 26 de septiembre de 2011

ORDENA TU VIDA


 
















Cuando las cosas en la vida te parecen demasiado... cuando 24 horas al día no son suficientes... Recuerda esta bonita historia. Cuando la leí me pareció interesante y siempre intento aplicármelo.

"Un profesor delante de su clase de Filosofía sin decir palabra tomó un frasco grande y vacío de mayonesa y procedió a llenarlo con pelotas de golf. Luego le preguntó a sus estudiantes si el frasco estaba lleno. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir que si.

Así que el profesor tomó una caja llena de canicas y la vació dentro del frasco de Mayonesa. Las canicas llenaron los espacios vacíos entre las pelotas de golf. El profesor volvió a preguntar a los estudiantes si el frasco estaba lleno, ellos volvieron a decir que si.

Luego... el profesor tomó una caja con arena y la vació dentro del frasco. Por supuesto, la arena lleno todos los espacios vacíos que había entre las pelotas de golf y las canicas, así que el profesor pregunto nuevamente si el frasco estaba lleno. En esta ocasión los estudiantes respondieron con un "si" unánime.

 Los estudiantes reían en esta ocasión.
Cuando la risa se apagaba, el profesor dijo:

- Quiero que se den cuenta que este frasco representa la vida:Las pelotas de golf son las cosas importantes, como la familia, los hijos, la salud, Los amigos, todo lo que te apasiona. Son cosas, que aún si todo lo demás lo perdiéramos y solo éstas quedaran, nuestras vidas aún estarían llenas. Las canicas son las otras cosas que importan, como el trabajo, la casa, el coche, etc... La arena es todo lo demás, las pequeñas cosas.

Si ponemos la arena primero en el frasco, no habría espacio para las canicas ni para las pelotas de golf. Lo mismo ocurre con la vida: Si gastamos todo nuestro tiempo y energía en las cosas pequeñas, nunca tendremos lugar para las cosas realmente importantes.
Establece tus prioridades, el resto es sólo arena.
Ahí les dejo uno de los secretos para poder ser feliz en la vida :)

jueves, 18 de noviembre de 2010

APRENDIENDO A VIVIR SIN TI


Éste es mi primer articulo, y se que no hay mejor forma de empezar a escribir mi blog que hablando de ti. Han pasado casi seis años desde aquel día horrible, y aún ahora, se me revuelve el estómago cuando lo pienso.
Lo supe ese día y lo sigo sabiendo ahora, que jamás podré dejar ese recuerdo atrás.

Un 15 de noviembre del 2004, me levanté para ir al trabajo. Después de ducharme, arreglarme y desayunar, como cada mañana me despedí de ti acariciándote la carita, agachándome para ver lo agustito que estabas tirado en el sofá. Yo siempre hablaba contigo como si fueras una personita. Siempre te hablaba como si tu tuvieras que contestarme, que gracia.
Me fuí sin saber que aquella sería la última mañana que te vería allí. Descansando. Esperándome para compartir conmigo esos dos minutos antes de irme a trabajar.

Él llego a mi vida en 1993. Fue un regalo de mis padres, el mejor regalo que jamás he tenido.
Esta carta y muchas otras fueron como una vía de escape a tanto dolor, rabia e impotencia.
Porque cuando te quitan un pedacito de ti, es difícil volver a ser el mismo.
Sempre t'estimaré.

                                                                                                                 08 diciembre de 2004

Daría todo lo que tengo para tenerte aquí conmigo. No imaginas lo mucho que te echamos de menos. Te recuerdo demasiado y a cada momento, porque todo lo que puedo hacer durante un día, lo relaciono contigo, siempre estas ahí.
He llorado mucho.
La vida me dio una gran patada ese 15 de noviembre cuando me dejo sin ti. Yo siempre intentaba protegerte. No soportaba la idea de pensar que algún día podía pasarte algo malo. Sabía que algún día tendría que enfrentarme a ello, porque eso es ley de vida, pero jamás te hubiera atribuido una muerte así.
Quería creer que jamás podrías irte. Pero sobretodo quería que cuando el momento de irte llegara, lo hicieras sin sufrir.
Ha sido todo tan distinto a lo que yo hubiese querido... Estoy destrozada.
Pienso en ti cada día, y se que eso no me ayudará a cicatrizar las heridas, pero es que la posibilidad de dejar de recordarte me aterra. No quiero olvidarte.
Ahora llega Navidad, y será muy duro no verte rodeando el árbol rebuscando entre los regalos. Será muy duro no poder comprarte tu regalo como cada año.

La semana pasada te compre dos rosas preciosas. Fui a verte y las dejé allí, encima del nidito donde descansas. Llegué sola y me senté al suelo, y las lágrimas no dejaban de caer. Pensaba y pensaba, en que tu estabas allí, debajo de mí, que tan sólo un poco de tierra nos separaba.
Los primeros días ni descansaba. Cuando llegaba la noche era lo peor. Ya dentro de mi cama se me hacía imposible dormir, sólo lloraba y lloraba pensando en que estabas solo en esas noches frías y oscuras, me partía el corazón.